jueves, enero 01, 2009

Gimli Glider


Hoy estaba en un bar, compartiendo un buen rato con unos amigos. Uno de ellos me hacía una pregunta sobre planeadores, y he aprovechado para contarle una historia tan increible como afortunada.

El 23 de Julio de 1983, un B767 se quedó sin combustible mientras volaba en crucero, FL410, porque unos habían calculado el combustible en KGs y otros en Libras. Es una de las consecuencias de obligarse a trabajar utilizando dos sistemas de medidas irreconciliables, que serán objeto de algún post un día de estos.

No es el único caso: Hace unos años unas sondas a Marte erraron la trayectoria porque parte del equipo de diseño había calculado las distancias en millas y la otra parte en kilómetros.

Volviendo a nuestro 767, agotar el combustible le supuso no sólo quedarse sin empuje, sino también sin energía eléctrica ni hidráulica, ambas imprescindibles para poder gobernar la aeronave.

Gracias a la RAT (Ram Air Turbine), un pequeño aerogenerador escamoteable alojado en el fuselaje que se extiende en estos casos de emergencia, y a la experiencia en vuelo en planeador de uno de los pilotos, pudieron obtener la mínima energía eléctrica e hidráulica suficiente para controlar precariamente el avión y aterrizar en un antiguo aeropuerto convertido en área de recreo, Gimli.

Todos se salvaron, incluso el avión, que tras reparar algún desperfecto en el tren delantero fue bautizado como Gimli Glider, el planeador de Gimli.