jueves, febrero 19, 2009

El avión más grande del Mundo no es el que crees

No es extraño que el desarrollo tecnológico que nos rodea, inundando numerosos aspectos de nuestras vidas, nos haga sentir ser la mayor expresión de la evolución de las formas de vida conocidas.

Esto no se reduce a que nos consideremos más evolucionados que nuestro gato, sino incluso de forma habitual, más avanzados que nuestros propios antepasados.

La Historia nos enseña que este concepto es un error: Socialmente, la Humanidad ha conocido periodos florecientes, y otros trágicamente involutivos.

Más allá del plano social, el progreso técnico tampoco ha sido un continuum a lo largo del tiempo. El camino de la ciencia es tortuoso. Todavía recuerdo cómo contemplaba atónito, hace algún tiempo, una tabla de instrumentos quirúrjicos grabada hace 5000 años en el templo de Kom Ombo, en el centro de Egipto, a orillas de un Nilo rodeado por el desierto.
Sin embargo, la cirugía moderna no se derivó de forma directa de aquella. Tuvieron que pasar muchos siglos hasta que se volvieran a ver esos mismos instrumentos en manos de los médicos.

Las pirámides también son un ejemplo de que tener herramientas rudimentarias al alcance de la mano no es un impedimento para que el record de construcción más grande siga vigente desde hace unos cuantos miles de años.

Hace unos días descubrí curioseando en Internet que el Antonov-225 es considerado por algunos el avión más grande del mundo. ¿A quién le cabe duda viendo esta fotografía?

Pues mira por donde, no es así. Pensará el lector, que el más grande es el Airbus A380. Pues tampoco. ¿Será entonces el Boeing 747, y nos han estado engañando hasta hoy? Pues lo siento pero no. ¿El Galaxy entonces? Nada.

Hay que remontarse al año 1947, cuando Hughes Aircraft diseñó el Spruce Goose H-4 Hercules.

Este hidroavión, construido en madera, sigue siendo el más grande del mundo en altura y envergadura.

Hay que decir que nuncá voló como se esperaba. La primera prueba le permitió elevarse 20 metros sobre el mar durante una milla, por efecto suelo. Quizás hubiera podido llegar a más de no haber perdido interés el programa.


jueves, febrero 12, 2009

Gracias ;-)


Ayer, por sorpresa, un par de amigos me comentaron que habían visto este blog referenciado en LimaEco.


LimaEco es un foro abierto a todos los que tienen interés por la profesión de control, y en él participamos muchos de los que nos esforzamos por acceder a ella. La inscripción como miembro para poder aportar suele producirse durante el tiempo que uno es candidato a la selección de AENA, y a partir de ese momento es dificil no prestarle atención asiduamente, especialmente cuando se vive en la escuela.

Encontrarás en la citada web mucha información sobre la convocatoria, los preparativos, el desarrollo de las pruebas y la vida en SENASA. El foro de LE es un excelente punto de encuentro y un fascinante espejo social, donde muchos sacan lo mejor de sí mismos, (y unos pocos lo peor).

Hace unos meses se produjo un espectacular aumento de su actividad bloguera, adornada además con el rescate de numerosos artículos de Jorge Ontiveros, un controlador aéreo con un prolífico historial de divulgación sobre la profesión, con títulos como "Descubrir el control aéreo", publicado por AENA.

¡Es un honor aparecer en LimaEco con una crítica tan favorable! Espero seguir aportando desde aquí una visión original de esta profesión.

Gracias por la cita.

lunes, febrero 02, 2009

Farewell, Microsoft Flight Simulator

Si hoy estoy orientando mi vida profesional hacia el mundo de la aviación, se lo debo en buena medida a dos factores: Por un lado, el estímulo que me imprimió la afición de mi padre por este sector, y por otro a Microsoft Flight Simulator.

Recuerdo con claridad cómo un día de verano, calculo que allá por el año 86, el padre de un amigo mío nos puso delante de la primera versión de este longevo simulador de PC. Era un Portable PC de IBM (debía pesar unos 20 kgs), 256 Kb de RAM, dos unidades de 5'25" y una pantalla de apenas 10" de fósforo naranja que se ocultaba tras un teclado basculante.

Todavía guardo una revista editada en el año 83 en la que aparecen capturas de aquella primera versión de la saga, que reproduzco a continuación.


No somos pocos los que, con los años, nos hemos convertido en "simutrastornados" alrededor de este juego, que siempre estuvo por delante de las prestaciones del hardware contemporáneo a cada una de sus versiones, quizás también por un desarrollo poco eficiente de sus mecanismos internos.

La aparición de una nueva versión de Flight Simulator nos tenía a todos siempre en vilo, despertaba pasiones celebrando su aparición o alimentando extraordinarios disgustos de quien siempre esparaba más. Lo cierto es que constituía para muchos una excusa perfecta para actualizar nuestros PCs.

Con los años aparecieron algunos simuladores alternativos de gran calidad, como Fly!, pero pasaron a mejor vida con relativa rapidez. En mi opinión, lo que consolidó la hegemonía del simulador de Microsoft no fue precisamente el gigante de la informática: Fue FSUIPC.dll.

La inicialmente llamada FS6IPC.dll desarrollada por Adam Szofran, y en manos de Peter Dowson desde hace años, la DLL Flight Simulator Universal Inter Process Communications (FSUIPC.dll) supuso la puerta de entrada a terceros desarrolladores que ofrecen hoy multitud de aplicaciones de valor añadido que arropan la oferta básica del simulador. Me atrevo a decir que esa interfaz de desarrollo ha propiciado muchas más innovaciones que el propio SDK ofrecido por Microsoft.

Se han desarrollado escenarios, aplicaciones de navegación, o admirables aviones como los Boeing de PMDG. Pero FSUIPC generó un movimiento mucho más potente y valioso: La simulación online.

Inicialmente SATCO, y posteriormente las actuales IVAO y VATSIM, dieron vida a una combinación de realidad virtual y comunidad en Internet. Tiempo antes de que existiese la Web 2.0 donde los usuarios participan en la red, creando contenidos y comunidades virtuales, los "PC pilots" nos asociábamos en redes que hoy cuentan con decenas de miles de miembros para simular con máxima fidelidad los procedimientos reales de la aviación comercial. Una realidad tan mimetizada y rigurosa, que hasta algunos hemos dado el paso para unirnos a la aviación real.

Hace unos días, tras 25 años de historia de la aplicación, Microsoft anunciaba que cerraba el estudio ACES (www.fsinsider.com), en quien había delegado el dearrollo de Flight Simulator, cuya última versión (FSX) llegó hace unos meses al mercado. La noticia es escalofriante, pues no son pocas las empresas que se han creado como proveedores de valor añadido al simulador, tanto desde el punto de vista software como hardware.

¿Qué ocurrirá ahora?
Aunque Microsoft no ha dado a entender que mantener esta línea de negocio esté en sus planes, quiero pensar que el negocio desarrollado alrededor de este entretenimiento no se desvanecerá, dado el tamaño de la comunidad y la oferta actual.

Hay quien tiene vocación de continuidad. Laminar Research, editora de X-Plane, ofrece desde hace años un simulador cuyos modelos de vuelo son reputados por tener una mayor fidelidad y base científica que los incorporados en MS Flight Simulator.
Hasta ahora, la mayor difusión de MSFS había impedido que terceros se embarcaran en grandes desarrollos para proporcionar alicientes a un simulador que tiene detrás un minúsculo equipo de desarrollo comparado con la estructura sobre la que reposaba la solvencia y estabilidad de negocio de FS.

La noticia de Microsoft no ha hecho perder el tiempo en Laminar: Han anunciado en su web que publicarán herramientas de migración para adaptar aviones y escenarios de FS a su plataforma. Esto, unido al insólito hecho de que hayan ofrecido recientemente una versión de X-Plane para el iPhone invita a prestar atención a un simulador que con un número creciente de adeptos ha generado un debate similar con FS al que se mantiene entre partidarios de PC y Mac.

El tiempo dirá.

Gracias por 25 años de simulación.

PD 17/02/09: He encontrado un enlace fantástico sobre la historia de Flight Simulator.