viernes, octubre 29, 2010

El filtro social está implantado

En junio analizaba la evolución del número de operaciones del aeródromo de Cuatrovientos, tomándolo como un indicador sólido de que no existe una correspondencia razonable entre el esfuerzo económico exigido para completar una formación altamente cualificada como la de piloto, y las expectativas reales que ofrece el mercado laboral al que se accede por haber superado dicha formación.

Esto demostraba que la inversión en formación no puede considerarse tal, al menos desde un punto de vista estrictamente económico. El retorno del esfuerzo económico no puede medirse en dinero, pues los sueldos percibidos por estos profesionales (los que acceden al mercado laboral hoy) a duras penas pueden hacer frente al pago de una deuda de tamaña magnitud. Quizás sí pueda cuantificarse la rentabilidad en términos intangibles, mediante un subjetivo eje de satisfacción, sea ésta la del propio candidato que se costea el sueño de volar, o la de un tercero que corre gustoso con los gastos del sueño ajeno.

Con este argumento adelantaba que la transformación de la formación de controlador aéreo, por la que son los alumnos quienes asumen los costes de la formación y no Fomento/AENA, no iba a suponer en ningún caso una sequía de candidatos: las futuras condiciones laborales de los controladores no impedirán que el mecenazgo paterno principalmente, o minoritariamente la ilusión propia del autofinanciado, obren el milagro de que se llenen las aulas.

No obstante, trasladar el elevado coste de la formación al candidato impide la igualdad de oportunidades en el acceso a la profesión, imponiendo un filtro socio-económico a los aspirantes. Consideraba entonces que, esta maniobra, impediría al proveedor de servicios de navegación aérea escoger entre los más adecuados para desempeñar las responsabilidades propias del control del tránsito aéreo. Ahora sólo podrá escoger entre los más aptos de entre los capaces de asumir el coste del curso.

Y así ha sido.

Hoy EuropaPress describe cómo SENASA ha logrado seleccionar 150 candidatos de entre los más de 2.000 que se han presentado a las pruebas de selección para acceder al curso. Recuerdo que hasta 2006, el número de candidatos oscilaba entre 6.000 y 8.000 para las mismas plazas.

Qué lástima.

Cuantos excelentes controladores se han quedado en el camino por no poder pagar la formación. Quizás sea el momento de que este gobierno de izquierdas extienda esta visión a toda la formación, escolar, bachiller y universitaria, logrando crear un país de élites económicas, en el que el tanto tengas tanto valgas.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Qué gran verdad. Lo que da realmente miedo es ver cómo hay gente dispuesta a tirarse al vacío y sin red para algo tan específico como el control. El curso que realicen no les valdrá para otra cosa que no sea controlar, y me parece que les han vendido la moto. No serán todos contratados y los que lo sean se darán cuenta de que los que les prometían sueldos de 200.000 euros estaban multiplicando aproximadamente por cuatro el sueldo que van a percibir, y si me apuras, he sido generoso en la estimación. Al tiempo.

Anton dijo...

Me apiado de los que pidan un credito o dinero prestado a familiares para alcanzar su sueño de ser controlador. Los financiados por su padre o "con posibles" pueden cambiar de tercio con mas dinero.
Lo lamentable es que como se comenta en el blog un gobierno que presume de "justiciero social" cierre el acceso a la profesión a los mas humildes. Soy hijo de obrero y vendí una Vespa que tenía para costear mi estancia en Madrid y llegar a ser controlador. Ahora sería imposible. El objetivo final es que esto se convierta en un gran negocio para empresas de la orbita de Aena: Senasa, Ineco, donde pronto florecerán puestos de Consejo de Administración para los afines al actual Ministro de Fomento y de una forma u otra para el mismo Blanco. Garantizan sus intereses personales a traves de los públicos. Esa es la verdad, la cruda realidad de todos y cada uno de sus movimientos disfrazados de populismo y persecución a la profesión de controlador aéreo.

Daermon dijo...

No solamente eso. No aparece con claridad en la noticia (parece como si hubiesen revisado 2000 solicitudes) cuando en realidad se les ha avisado en estricto orden de inscripción (por eso tuvieron 900 en los primeros 5 minutos) para hacer el exámen Feast. Así hasta llenar los 150 que tienen de momento, 48 ahora y el resto en sucesivas promociones. Esto se puede contrastar en el foro de Aerovías y antaño en el de LimaEco.

Es decir, que no solamente el campo muestral es más reducido como bien señalas (de 8000 a 2000) sino que además los criterios de selección son mucho más laxos.

Esto es una jugada magistral desde el punto de vista económico puesto que a) no genera gastos en la escuela, solo beneficios b) al rebajarse el criterio de calidad se puede inundar el mercado (en el que ciertamente faltan controladores) con los que salga de esta formación.

A partir de este punto apunto dos posibles futuros. Si Senasa mantiene el mismo nivel de exigencia que antaño, suspenderán muchos más que el 2% que lo hacía hasta ahora al haberse eliminado los filtros previos... lo cual como he dicho no repercute negativamente en la empresa, solo en el desdichado.
Y si Senasa rebaja sus niveles de calidad para que los que han pagado 45.000 euros puedan salir con su flamante título, entonces serán los nuevos proveedores de servicio los que tengan que negarles la habilitación al no dar el nivel requerido.